El Valencia no ha comparecido a este año 2020. Algunos deben seguir de vacaciones de Navidad. Un discreto 1-0 contra el Eibar desembocó en encajar 7 goles en dos partidos, contra Real Madrid y Mallorca. La nota positiva, lo que hace que el aficionado de Mestalla pueda pensar que es una fase, es el joven canterano. Ferrán está jugando como si de un veterano se tratase.
Ferrán, nacido el 29 de febrero del año 2000 (este año sí podrá celebrar su cumpleaños), se ha consolidado en la banda derecha del equipo del murciélago a sus 19 añitos. Hablamos de un jugador que, a priori, tiene de todo: es rápido, tiene regate, asiste, marca, tira faltas, tiene habilidad táctica... es un talento puro que si lo cuidan podemos estar ante uno de los grandes líderes de la selección en el próximo mundial.
Hablamos de un jugador que, según transfermarkt, su valor se ha incrementado de 5 a 40 millones de euros desde diciembre de 2018. Es decir, en poco más de un año a multiplicado por ocho su valor.
Ferrán Torres es un chico que llegó al Valencia Mestalla en la 2016/17. Apenas necesitó dos partidos ese año para ser subido al primer equipo. Para la 2017/18 alternó 10 partidos en 2ªB con 13 partidos de Liga y 3 de Copa del Rey. Tras una primera vuelta muy buena en 2ªB y un gran campeonato con la selección sub 17, disputó toda la segunda vuelta con el primer equipo, eso sí, el día que más jugó, jugó 29 minutos, quitando los 77 minutos que disputó contra en le penúltimo partido de la temporada. Pocas oportunidades para desatar todo su potencial por lo que sus números tampoco fueron espectaculares: dos asistencias.
Para la 18/19, Ferrán se asentó como uno de los jóvenes talentos y empezó a ser titular de manera asidua por lo mucho que aportaba al juego de ataque. Sus carreras al espacio generan huecos muy aprovechables por otros delanteros. Su visión de juego permite hilar un juego muy vistoso con grandes pases al hueco; pero no fue un año de mucho acierto para el equipo 'Ché', que muchas de esas ocasiones se fueron al limbo. Su buen hacer en liga no pasó desapercibido y participó bastante en ambas competiciones continentales, Champions y Europa League. En Copa, sin embargo, a pesar de ser fijo en toda la competición, no jugó un minuto ni en semis ni en la final.
Este año, siendo ya una pieza clave, sus números empiezan a ser los de un jugador que tiene que jugar. Con 19 partidos de liga, en los que ha anotado 4 goles y repartido 3 asistencias, y cuatro de Champions, 1 gol y 1 asistencia, se ha convertido en un jugador muy entretenido de ver. Este fin de semana, de ser descartado por lesión a ser lo único bueno que nos ha mostrado el equipo valencianista contra el Mallorca.
Por ponerle un pero, quizá la falta de gol. Sería lo único que se podría decir que le cuesta. Mete pocos goles. En su faceta de extremo, quizá no sea muy importante, sin embargo, cuando tiene que hacer esa labor de segundo punta por detrás del delantero, se echa un poco en falta ese instinto asesino que te puede dar un delantero, pero no es un problema grave ahora mismo.
Con Ferrán se ve el potencial del jugador que el Real Madrid intenta hacer de Lucas Vázquez o el Barcelona con Sergi Roberto. Es cierto que Roberto juega en banda más retrasado pero en el caso concreto de Lucas, Ferrán se lo come por los pies.
Un jugador muy nuestro, el extremo fino y de calidad, un tío que puede ingresar en el Club de los Reyes, Joaquín, Vicente, etc. Un estilo de futbolista muy nuestro y del que estábamos un poco huérfanos. Un tipo de futbolista que desde que se instauró el tiki-taka casi no vemos en nuestras canchas y que a mi, personalmente, me enamoran.
Grande Ferrán, buena progresión, no tiene 20 años pero pinta de maravilla lo de este chaval.
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