Hoy venimos con una historia un tanto triste. Un futbolista que estuvo en la cima, lo tuvo todo y que, hoy por hoy, con 31 años, se encuentra sin equipo y sin haber sido el futbolista que de él se esperaba pero...¿por culpa de quién? Ahora lo veremos...
Jeffrén Suárez, extremo capaz de jugar por ambas bandas, con velocidad, regate y un olfato de gol típico de los extremos sudamericanos. De origen venezolano y nacionalizado español, desarrolló su carrera internacional con las categorías inferiores de la selección española, siendo titular de una selección sub-19 campeona de Europa en el año 2006 en Polonia. Su trayectoria es conocida por su primera etapa, en la cual, siendo un habitual del FC Barcelona, consiguió todos los títulos que tiene en su haber.
Siendo uno de los jugadores del filial del Barcelona que encandiló a Pep Guardiola, tuvo sus oportunidades en el primer equipo del Barça. Como he dicho, era un jugador habitual de la primera plantilla del equipo azulgrana, lo que no quiere decir, y esto quiero que quede muy claro, que yo haya dicho que Jeffrén llegó a ser un futbolista titular del Barcelona. Estamos hablando de un caso parecido al de Bartra también por aquellas fechas o Nacho en el Real Madrid. Quizás, incluso, un escalón por debajo de ambos en cuanto a importancia. Pero eso no lo convierte en un futbolista que no tuviera minutos ni su importancia relativa en el equipo. Pero en agosto de 2011 fue traspasado al Sporting de Portugal con una opción de recompra que se guardaba el Barcelona. La idea original pasaba por que Jeffrén cogiera minutos y experiencia de una manera menos competitiva y exigente de lo que es la plantilla de todo un FC Barcelona, pero la jugada no salió. Y con el paso del tiempo hemos ido presenciando como se fragua la carrera de un 'juguete roto' siguiendo, paso por paso, los puntos del manual.
En primer lugar, empezar como futuro 'crack' en la cantera de un equipo grande. Eso, si no tiene el control adecuado, provoca un endiosamiento difícilmente corregible a posteriori. Y es ese endiosamiento lo que acaba con la carrera de Jeffrén poco a poco. Desde su llegada al Sporting de Portugal tuvo problemas por su condición de titular. Por muy bueno que seas, los méritos laborales deben tener relación con tu rendimiento laboral y, en menor medida, con lo que puedas llegar a dar. Y nunca al revés. Y Jeffrén tuvo un rendimiento en el Sporting bastante irregular. Demostrando su calidad en los momentos en los que más se le discutía y desapareciendo cuando se contaba con su estelar aportación. En segundo lugar, recibiendo unos títulos colectivos de los que apenas has sido partícipe. Esto es importante por que se trata del dato lapidario de todo 'juguete roto'. ¿Eres bueno? sí, pero paciencia y humildad, que no eres tan bueno como crees... "¿Ah, no? Pues tengo 3 ligas españolas, 1 copa del Rey, 1 Champions League, 1 copa intercontinental, 1 europeo sub-19 y 1 europeo sub-21" y ante ese currículum, se complica el ejercicio de hacerle ver al chaval que no está dónde cree estar. Y claro, cuando estás ahí y te llama Venezuela para que juegues con la vinotinto en vez de con la selección española, es normal que declines la oferta pensando que vas a seguir con la línea ascendente y que tu sitio está en la selección española de fútbol. A pesar de todo, sigue siendo un ejercicio de optimismo que lejos queda de otros como el de Rafinha con la 'canarinha' o Depay con su fichaje por Real Madrid o Barcelona. Dentro de lo que cabe, en el caso de Jeffrén existían indicios de futuro 'crack' o, por lo menos, jugador válido para la selección española. Pero claro, ante la falta de regularidad y consistencia del futbolista, el Sporting de Portugal no renovó a un futbolista que fichó por 3,75 Millones de euros con 23 años, pero que 3 años después, con 26 años, no había sido capaz de consolidarse como titular en la liga NOS. Pero..."¿a quién le importa eso? con todos los títulos ganados con el Barcelona se demuestra lo bueno que soy" debió pensar el jugador al llegar libre al Real Valladolid. Por supuesto, en el equipo vallisoletano repitió lo ocurrido en Portugal. Empezó todo lo bien que se podía esperar de un buen jugador que pronto dejó de rendir a ese nivel. Bélgica, Suiza y Chipre fueron sus siguientes destinos hasta llegar a la fecha actual en la que, a sus 31 años, se ha quedado sin equipo al cierre del mercado de fichajes. Un triste final para un futbolista que acabó jugando con la selección venezolana tras mucho rogar y disculparse por haber rechazado en su día la llamada. Pocos casos más claros de JUGUETES ROTOS que el de nuestro protagonista de hoy. No sólo porque se perdió un buen futbolista, sino porque el motivo no fue otro que convencerlo de que era mucho mejor de lo que realmente era y que su actitud en los equipos por los que pasó fuera más cercana a su idea de sí mismo que a la realidad. Aun así, desde aquí, le deseamos lo mejor a Jeffrén y esperamos que pueda aún encontrar equipo (dado que, todavía, aquellos equipos con menos de 25 fichas pueden hacer incorporaciones de jugadores libres) y que en algún momento podamos
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