El Tottenham se ha convertido durante estos últimos años en un habitual de la Champions y de los puestos de arriba de la Premier League. Pochettino, Kane, Vertonghen, Eriksen o Dele Alli suelen copar los elogios y los méritos, pero si hay un jugador que ha crecido de manera vertiginosa en las cuatro temporadas que lleva en el club y que está siendo pieza fundamental, ese es Son. No estamos diciendo que nadie aprecie o minusvalore a Son, pero queremos resaltar que el jugador de 26 años, es una realidad contrastada y un auténtico jugadorazo.
Heung-Min Son, toda una estrella internacional que hace 10 años, con tan sólo 16 primaveras, fichaba por el Hamburgo para convertirse en profesional. Jugó en el equipo reserva del conjunto alemán hasta hasta el 2010, cuando dio el salto a la Bundesliga. Amén de esta primera temporada, estuvo otras dos en el conjunto del rombo. Un total de 78 partidos y 20 goles anotados son unos números muy importantes para un extremo de 20 años recién cumplidos. Además, con apenas 19 años, el coreano consiguió ir en la lista del equipo que quedaría en tercer lugar en la Copa de Asia de 2011.
Su buen hacer en el equipo del norte de Alemania, llamó la atención de sus rivales y fichó por el Bayer Leverkusen. Junto con el fichaje de Emre Can y el de un jovencísimo Julian Brandt, el Leverkusen intentaría mantener el nivel de un equipo del que se habían marchado jugadores como Schürrle o Carvajal. Dos buenas temporadas del coreano en Leverkusen, en las que juega Champions y colabora con 29 goles en 85 partidos dando un nivel bastante bueno. Mientras tanto, con su selección consigue ir al Mundial del 2014 y ser subcampeón de Asia en 2015.
Empieza a oírse aquello de "el chaval juega bien". Bastantes equipos se fijan en él, pero es el Tottenham el que se hace con su fichaje. El coreano aterriza en Londres para empezar la 2015/2016. Un primer año complicado, de adaptación por así decirlo, en el que Son no destaca mucho. Es cierto que cuenta con la confianza del técnico que le da participación hasta en 42 ocasiones. Es cierto que el coreano sólo anota 8 goles, pero esa confianza que el entrenador deposita en el recién llegado extremo da sus frutos la siguiente temporada. Tras un año de adaptación, Son la rompe en la 2016/2017; 21 goles en 47 partidos convierten esa temporada en la más goleadora del extremo hasta la fecha. Los goles y el juego de Son empiezan a ser famosos en el mundo entero tras el subcampeonato del Tottenham.
El extremo coreano, con 24 años, es toda una revelación, no solo aporta goles, se engrana en el equipo de una manera espectacular, lo que convierte la delantera de los Spurs en una máquina perfectamente engrasada. Eriksen, Kane y Son hacen las delicias de una afición no muy proclive a festejar éxitos deportivos y que ahora pelean de tu a tu contra el Madrid, la Juve, el PSG o el Barcelona. 53 partidos y 18 goles sirven para ayudar al Tottenham a quedar tercero en la Premier y dar un repasito al Madrid en la ronda de grupos de la Champions, en la que acabarían eliminados por la Juventus de Turín.
Este año, Son ya ha alcanzado los 18 del año pasado. Indiscutible estrella durante la lesión de Kane para mantener al Tottenham en el sitio que se merece, fue figura clave en la ida contra el City de cuartos de final de la Champions anotando el gol del partido.
El joven extremo de 26 años pasó por un mal trago tras el Mundial. La mala actuación de Corea del Sur obligaba al extremo a perderse la temporada para realizar el servicio militar al no haber conseguido un mérito deportivo importante el año que le tocaba hacer "la mili". Londres estaba blanco de miedo y Son lloraba inconsolablemente; sin embargo, la vida le dio otra oportunidad y no falló: llegar a cuartos de final en la copa de Asia de 2019 le liberó del servicio militar de su país.
Pasado el susto, Son se encuentra en la plenitud de su carrera. Hablamos de un jugador que casi siempre cumple. Es cierto que podría tener un número de goles más elevado pero no son malos números per se. Heung-Min Son es un jugador, que por el motivo que sea, parece llamar menos la atención que los Kane, Eriksen o Dele Alli, pero lo que es innegable es que el extremo es una realidad contrastada.
Heung-Min Son es un jugadorazo a tener muy en cuenta para un futuro a corto plazo. Sus 26 años le hacen estar en una plenitud en la que ya sabe mucho, pero le queda por aprender, y sobre todo, le queda mucho por dar y ofrecer. No sabemos cuanto tiempo tiempo le durará al Tottenham, pero conociendo a su presidente, el que lo quiera tendrá que poner muchos billetes encima de la mesa.
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