Jackson Martínez es un futbolista recordado por todos los atléticos y no precisamente por el juego que mostró a orillas del Manzanares, más bien por el rápido traspaso a China y el montante que dejó en las arcas rojiblancas sin prácticamente rendimiento. Pues el bueno de Jackson, tras superar un auténtico calvario, se vuelve a sentir futbolista.
Decir que un futbolista de 31 años es un "Jugador a seguir" puede parecer una broma o una estupidez, y desde luego que a eso suena, el caso pide a gritos un "¿Qué fue de..?", pero nos vamos a tomar una licencia y abrir el abanico de opciones para comentar el caso de un futbolista que ha sufrido un auténtico calvario y en el que la responsabilidad se dirime a partes iguales entre las lesiones y la gestión de una carrera llevada por un señor al que sólo le importa el dinero y que ni siquiera era su representante. Nosotros os contamos el caso, la sección la elegiréis vosotros.
No voy a decir que soy o que haya sido un gran fan de Jackson Martinez, como jugador nunca me ha parecido la superestrella que se decía que podría llegar a ser o incluso que ya era, no ha estado ni cerca, pero sí me llama la atención que un jugador que la rompió en el Oporto llegase a ser considerado tan malo por el mundo fútbol. Jackson Martinez era un buen futbolista, sin más, ni tan bueno en Oporto, ni tan malo en el Atleti, eso sí, la claridad para el gol la tenía, aunque se fue nublando un poco.
Una carrera que se inició con 19 años en Independiente de Medellín y culminó en su salto a Europa pasando por la Liga MX, se empezó a truncar cuando mejor estaba el ariete colombiano. En México alucinaron con sus 36 goles en 68 partidos (0,53 goles por partido). No sólo los propios mejicanos alucinaron, ultramar, en la pequeña pero preciosa ciudad portuguesa de Oporto, olieron futuro y calidad, y lo ficharon. ¡Qué poquitas veces se equivoca el Oporto en la contratación de jugadores jóvenes sudamericanos!. Luego llegarán mas o menos lejos, pero el Oporto es un auténtico especialista en comprar barato, sacar rendimiento y vender por dinerales. Con Jackson no iba a ser menos.
Tres años estuvo el colombiano jugando con 'Los Dragones'. Tres años de ensueño. Muchos goles (94 dianas en 143 partidos) y muchos títulos. Con James hizo dupla especial, lástima que sólo durara un año, sin embargo, Jackson Martinez hizo una cosa dificilísima en mi opinión, consiguió que en el Estadio do Dragao se olvidaran de un tal Falcao.
Su espectacular promedio de 0,66 goles por partido le avaló para seguir los pasos de Falcao, curiosamente también colombiano, y recaló en el Atlético de Madrid, de donde se fue rumbo a China por 45 millones tras 22 partidos y 3 goles. Recuerdo la foto de la rúbrica del traspaso. Todos felices, Jorge Mendes exultante y Jackson con cara de no saber porqué firmaba eso ni porqué se había dejado convencer por un señor que no era ni su representante.
Al Guangzhou Evergrande que se fue, no se gana uno mal la vida en China si es un jugador de tirón. Hasta Darío Conca ganó su dinerito en China, pero el calvario de Jackson acababa de empezar. Al poco de llegar se implantó la norma de los tres extracomunitarios para la Champions League asiática y mas tarde para la Superliga China. Cierto es que Jackson tuvo problemas con un tobillo en el que padecía una lesión crónica, pero casualidad también que siendo Scolari (brasileño) el técnico, escogiese a Alan, Goulart y Paulinho (los tres brasileños) para jugar, dejando fuera a Jackson.
La carrera en china de Jackson se resume en 10 partidos de Liga, 4 de Champions asiática y 1 en Copa, con la cifra de 4 goles, todos conseguidos en liga. ¿Periodo en China? Prácticamente dos años y medio y todo lo que jugó lo jugó el primer año ya que Cannavaro tampoco le dio bola a pesar de la salida de Paulinho. No hay futbolista que aguante esto.
Pero la puerta se ha abierto para Jackson. Cuando todos pensamos que era un ex-futbolista, ha fichado por el Portimonense, equipo de segunda fila en Portugal, pero que por lo menos juega en primera división.
Jackson Martínez espera su debut, volver a sentirse futbolista, y aunque con 31 años es un poco tarde, nos apetece seguir a Jackson en su regreso tras casi dos años fuera de un terreno de juego. Cualidades para hacer goles tiene, pero ni la edad ni el tiempo inactivo juegan a su favor. Nosotros lo tomaremos como un jugador a seguir pero con alta probabilidad de que no salga bien. Es un claro caso de vuelta a la élite, pero para gustos, los colores. A nosotros nos despierta cierta curiosidad ver que es capaz de hacer el colombiano, ¿a vosotros no?
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