La Copa del Mundo de la FIFA sigue su curso y ya vamos teniendo los primeros clasificados y eliminados para la fase final y los más que posibles batacazos se van definiendo. A pesar de lo primero, me es imposible no hablar de la selección Argentina, donde el mal endémico de no saber a que se quiere jugar se prolonga cada día más y más en el tiempo.
En este punto existen dos líneas argumentales que van por lo fácil y que no están sometidas al análisis que debe hacer todo equipo de fútbol y que se debe hacer sobre todo equipo de fútbol. Hablo de los argumentos que se basan en que la dirección de la 'albiceleste' es un caos y que Messi no aparece. Como se habrá deducido, si alguien esperaba que le diese un palo a Messi se ha equivocado de artículo. Está claro que la dirección de la Asociación de Fútbol Argentino es un caos, pero como lo ha sido la RFEF y lo es, por ejemplo. Se puede tener más o menos fe en Tapia pero la realidad es que tampoco se le ha dejado trabajar mucho. Tiene gracia que se critica a la AFA cuando la RFEF ha sido desmantelada por corrupción y España sigue dando un nivel más que aceptable.
Que Messi no aparezca no resume los males de una selección que se muere ahogada en un sistema que cambia constantemente y en el que los jugadores están bastante perdidos. Es más, yo diría que es lo contrario, la ausencia de Messi es un efecto y no una causa del rendimiento de Argentina. "Es que falló un penalty" dirán muchos, bien, es correcto... ¿y? ¿quién no ha fallado un penalty? Raul falló en la Euro del 2000 contra Francia, CR7 en Champions con el Utd y con el Madrid, de hecho, CR7 falló un penalty contra Austria en la pasada Euro, el partido acabó con empate y el torneo con Portugal levantando la copa ¿de qué estamos hablando?. Ojo, no disculpo a Messi, esto que quede bien claro, creo que Messi debería revelarse contra la situación y tirar del carro 'Gaucho' como lo hace el portugués con 'los Lusos'.
Los problemas de Argentina en este Mundial, y digo Mundial porque los apuros de la clasificación parecen olvidados y saneados, se reducen a estos dos partidos, sin contar de donde se viene, y claro, de aquellos polvos estos lodos. Hablamos de una selección en la que todo se reduce a lo que haga Messi. No hay análisis más allá. Estoy de acuerdo en el punto de que al que más hay que exigir es a Messi porque es el mejor del mundo, junto con CR7, pero nadie ha parado a hacer las cuentas de cuánto da Messi a cambio de lo que recibe en la selección. No soy seguidor del FC Barcelona, pero no hace falta un máster para entender que en el Barcelona, Messi recibe y da a partes iguales. Se le viene la gente encima por fallar un penalty y se olvidan que sin él no habrían cogido el avión a Rusia.
Y ahora pregunto yo: ¿Aparcamos tema Messi y nos centramos?. Sampaoli es un técnico mediocre, se quiera ver como se quiera ver. "¡¡Estás loco!! Tiene una Copa América con Chile", ya, y Di Mateo una Champions, ¿A dónde queremos llegar con eso?. Sampaoli no entiende los tempos del partido, no tiene soluciones tácticas desde el banquillo, nunca mejora, es muy difícil encontrar un partido de Sampaoli en los últimos tiempos en los que el equipo haya ido de menos a más, sino todo lo contrario. Se limita al cambio de cromos, el 9 por el 9 y el 5 por otro 5, los cambios tácticos se producen de partido a partido y nunca durante. Es un técnico que si le sacas de los partidos de ida y vuelta se pierde. Esos partidos que siempre se dice: "qué bonito de ver pero que sufrimiento para el entrenador", pues eso lo propone Sampaoli desde un inicio. Blanco y en botella.
No entro a comentar la lista porque ya lo hizo mi compañero y de forma muy acertada, he de añadir, en "ARGENTINA: MESSI O DESASTRE NO HAY TÉRMINO MEDIO", pero si voy a entrar a las decisiones que se desprenden de lo acontecido por ese anuncio de jugadores. Lanzini se rompe, llamo a Enzo Perez, hasta aquí correcto. Lo que no entiendo es que se juegue durante toda la clasificación con Lo Celso-Banega y el primero no haya jugado ni un minuto y el segundo menos que Biglia. No se alcanza a entender. Como tampoco se entiende que se cambie el sistema de línea de cuatro atrás a tres centrales con carrileros, dejando a Mascherano y Enzo Perez para parar a Modric, Rakitic y Kramaric habiendo propuesto la línea de cuatro hasta en los amistosos contra España y Haití, que decir durante la clasificación. Y ya, como traca final de sin sentidos, Mezza por delante de Dybala. A mí eso de que Dybala y Messi son incompatibles que me lo expliquen muy muy despacito, porque no me entra en la cabeza. Al final al Barcelona le va a salir bien que ni Dybala ni Griezmann hayan querido fichar por los culés... Otro punto es Pavón, un jugador que lo jugó casi todo en clasificación y de repente, simplemente desapareció. Me parece estupendo que tengas fe en los porteros que juegan en Europa, pero de ahí a que si se te rompe el suplente del Manchester Utd me saques al suplente del Chelsea... ¿No hay más? ¿De verdad?
Argentina, sin tener mal equipo, se convierte en cristal de murano anímicamente. Cuando Messi no está bien el equipo se viene abajo, ni se enteran del sistema ni son capaces de reaccionar ante nada. No ha mucho que se oía que la lesión de Neymar era peligrosa para el Real Madrid porque jugaba Di María, ahora ya no, ahora es un tonel. Argentina tiene jugadores que la rompen en los equipos en los que juegan pero no saben qué hacer cuando los pones a todos juntos, es inexplicable, hasta que analizas las cuestiones tácticas del equipo.
Los jugadores por supuesto que son culpables también, llevas la camiseta de una selección que se caracteriza por la garra, por jugar destrozados físicamente y dar su último aliento por la bandera que representan, cosa de la que siempre he sentido una especial envidia, pero eso no se produce porque el que cobra siempre es Messi. Llevan tantos partidos esperando y viendo como el 10 les rescata que parece que se quedan sin ideas, en cuanto sale algo mal empiezan a caer como fichas de dominó.
En fin, siempre he dicho que el Mundial me encanta porque es una Eurocopa pero con Brasil y Argentina, pero la decepción este año ha sido muy grande. Independientemente de si al final clasifican o no, Argentina tiene que hacer autocrítica, como la hizo España en 2014 y como casi nunca la ha hecho Brasil y así les va desde 2002. Hay que cambiar muchas cosas en esta selección, llevan con el mismo bloque tres mundiales seguidos y se ve que no acaba de funcionar. Argentina, dale a Messi y Messi te devuelve, en España lo vemos todos los domingos, esperar la fórmula mágica de 'la Pulga' no siempre sale bien. Para exigir, hay que dar. Y Sampaoli, como te dirían allí: "¡Dale viejo! ¡Los experimentos con gaseosa!"
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