A poquitas horas de que comience ya el Mundial, acabamos el repaso a nuestros cuatro grandes favoritos con la campeona del último Mundial y de la última ConfeCup con un sorprendente equipo B. La Mannschaft siempre es candidata pero ganar dos Copas del Mundo seguidas se antoja una tarea casi imposible, bien es cierto que si hay equipos con ADN como para conseguir llevar a cabo dicho hito esos son Brasil y Alemania.
Alemania es una de esas selecciones que ha conseguido que el relevo generacional necesario en cualquier equipo se realice de una manera suave y sin afectar al rendimiento del conjunto. Respentando su estilo pero adaptandose a las exigencias de cada competición ha ido convirtiendose en ese monstruo del Lineker hablaba así: "El fútbol es un deporte que jugan 11 contra 11 y siempre gana Alemania". Hablamos de un equipo que ganó la Eurocopa de 1996 contra la República Checa y en Francia 98 cayó en cuartos contra una sorprendente Croacia. Desde entonces en los mundiales ha sido una máquina: en 2002 perdió contra Brasil en la final, en 2006 cayó en semifinales contra Italia, otra vez le elimina la campeona, en 2010 otra vez contra la campeona, España, en semifinales y en 2014 lo gana... es una espectacular forma de estar durante casi 20 años llamando a la puerta para ganar la tan ansiada estrella. El no bajar los brazos.
También hay que tener en cuenta que por contra en las Eurocopas, desde que la ganara en 1996, no ha rendido ni la mitad de bien que en las Copas del Mundo, es como si no les motivase, y por supuesto la de Francia 2016 no fue una excepción, donde les eliminó una Francia con dos errores muy groseros de Neuer. Quitando la edición de 2008 en la que perdieron la final contra nuestra selección, los resultados han sido discretos. En 2000 no pasaron de la ronda de grupos, en 2004 mas de los mismo y en 2012 fueron eliminados por Italia en semifinales, es decir, al igual que en 2016, por la subcampeona, en otras palabras, por la que perdió la final. Justo al contrario que los mundiales.
Se podría decir que luces y sombras si abarcamos todo, pero en lo que se refiere al Mundial, es claramente la dominadora de los últimos años en rendimiento general. Tienen un algo que en Copa del Mundo les hace estar ahí. No sueltan, son como un martillo, golpean, golpean y golpean hasta que rompen la puerta y consiguen cosas como las que vimos en Brasil.
Además de todo esto, Löw ha conseguido juntar a un equipo de veteranos competidores con chavales muy prometedores y de altísima calidad, y esto lo lleva haciendo mucho tiempo ya. Los Müller, Khedira, Kroos, Gomez , etc, han dejado de ser las promesas y de ser el apoyo de los Klose, Schweinsteiger, Lahm, etc y ahora son los veteranos de un equipo en el que van muy bien acompañados de los Werner, Rüdiger, Brandt o Draxler. No es una selección que tenga grandes individualidades más allá de Draxler o Reus, pero con jugadores de equipo, que se sacrifican por el bien del conjunto, que leen los partidos de forma increíble, jugadores de trabajo menos vistoso pero siempre eficiente, arman una selección muy poderosa, eso sí, en mi opinión un puntito por debajo de la de Brasil 2014.
A su favor tiene que Brasil desde que se puso la primera estrella allá por 1958, nunca más ha ganado un Mundial sobre suelo Europeo, pero ojo, ningún equipo europeo había ganado un Mundial en América hasta que lo hizo la Mannschaft. Por la parte contraria, la decisión de Löw de dejar fuera a Sané en favor de jugadores como Rudy o Goretzka no es del todo comprensible más allá de formar un equipo sólido en el medio campo, al igual que tampoco lo sería el rumor de que Neuer será el titular, cosa que, sinceramente, me cuesta creer, eso lo tendría que ver para creérmelo.
Alemania tiene encima de la mesa el igualar a la Brasil de Pelé y a la Italia de los 30 en mundiales consecutivos, cosa nada sencilla, pero la motivación de engalanar tu camiseta con las mismas estrellas que la 'canarinha' debería superar con creces cualquier otra distracción o problema a los que te puedes enfrentar en una competición de 7 partidos. No lo tendrá fácil, hay equipos muy competitivos y como ya comentamos con el caso de España, con muchas urgencias, pero Alemania no se puede descartar para estar, como mínimo, en semifinales.
Un equipo que representa la idiosincrasia teutona, es como un diesel, de menos a más hasta que consigue velocidad de crucero y entonces ya se te viene encima un Panzer. Una selección que sin dejar de lado su estilo es capaz de modificar el suyo en momentos puntuales para sacar a la luz tus debilidades, pero que a veces, como en las Eurocopas, se ven campeones antes de terminar el campeonato. Veremos que nos ofrece la Mannschaft, tetracampeona del Mundo, este verano.
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