Tras haberse disputado la final de la UEFA Champions League, el Real Madrid se proclamó, por tercer año consecutivo, como campeón de la máxima competición continental. Y ante semejante logro, creo necesario dedicarle un espacio en nuestra sección LEYENDAS a una persona que, aunque como futbolista ya lo merecía, como entrenador ha logrado algo que nadie, a lo largo de la historia de la Copa de Europa había conseguido, ni con el anterior ni con el actual formato.
Zinedine Zidane, nació y se crió en Marsella. Allí disfrutó del juego de su ídolo de la infancia y jugador por el cual su hijo se llama Enzo, Francescoli. El uruguayo, que pasó sin mucho éxito por Europa, marcó un antes y un después en la vida de Zidane. El bueno de Zizou quería ser como Enzo. Para lo cual, tuvo que dejar su casa e ir a Cannes dónde empezó a jugar al fútbol. De Cannes a Burdeos, y de Burdeos a la Juventus de Turín dónde coincidió con una generación espectacular de futbolistas como Inzaghi, Del Piero o Davids. Tras 5 temporadas en la Juventus, fichó por el Real Madrid de los "galácticos" para jugar junto a Ronaldo, Beckham o Roberto Carlos. La verdad sea dicha, ponernos ahora a hablar de la carrera de uno de los, sin duda alguna por parte de nadie, 10 mejores jugadores de la historia (si no es un top 5, creo que no hay duda posible sobre que es un top 10 histórico). No sólo por ser uno de los mejores de la historia, sino también por su "reciente" retirada con respecto al resto de jugadores que conforman la lista de los mejores de la historia.
Todos hemos visto jugar a Zidane pero, para el que no lo haya hecho, además de sugerirle que busque en internet partidos enteros del astro francés, diré que se trataba de un mediapunta puro, un '10' con capacidad táctica y técnica como para bajar a recibir unos metros por detrás de su posición teórica y empezar su carrera de mediocentro, así como abrirse a la banda sobre el papel y hacerse con el 'callejón del 8' como hizo durante su etapa final en el Real Madrid, dejando toda la banda izquierda para las subidas del lateral izquierdo: Roberto Carlos. Zidane fue siempre un jugador fácilmente distinguible por su clase, su coordinación, su inteligencia táctica y su capacidad para leer el juego. Que un mediapunta tire del carro y haga jugar a su equipo es algo que no se ve todos los días. Lo suyo, es que sea el mediocentro el que, desde unos metros más atrás, lea el partido y vea si es necesario que el mediapunta lance un pase entre líneas por el centro, o a lo mejor es más rentable entrar por las bandas y colgar balones al área. Esa decisión es tarea del mediocentro. Pero Zidane era un mediapunta que recorría 15-20 metros hacia atrás para pegarse a Makelele (tanto en el Madrid como en Francia), pedirle el balón y empezar la jugada con una conducción fluida y rápida, cabeza alta y dejando defensas por el suelo a su paso. Cumplía las funciones de tres perfiles de jugador distintos: creador, pasador y llegador. La subía como un mediocentro, daba el último pase como un mediapunta, y llegaba a portería (tanto al área como con golpeo exterior) como esos pateadores que, dejando un poco a un lado sus conocimientos tácticos (los hay que los tienen como Kroos y los hay que no como Milner), tienen tanta clase en el golpeo y la distribución en largo del balón que deben estar cerca del área o, por lo menos, llegar desde atrás por sorpresa. Y Zidane aportaba todas estas cosas gastando una sola ficha en la plantilla y pudiendo jugar con otros 10 sobre el campo. Hoy por hoy, si quieres tener todo eso sobre el verde, solo puedes poner a otros 8.
Una vez visto lo que fue Zidane como jugador, vamos a analizar al Zidane entrenador. Ese míster que, sin experiencia en la alta competición desde los banquillos, se ha metido entre pecho y espalda 3 UEFA Champions League y una Liga en 3 años y medio. ¿Se puede empezar mejor la carrera de entrenador? Pues los hay empeñados en defender que sí. Porque Zidane, por motivos que no termino de entender, tiene decisiones polémicas a lo largo de una temporada que, si bien es cierto que puedo o no estar de acuerdo con ellas, generan una animadversión hacia él en cuanto a su capacidad de ser entrenador que muchas veces sobrepasan la línea de la falta de respeto. Y el problema es que no tengo muy claro que más tiene que hacer para que esto no ocurra. Una de las frases más repetidas en este país, desde madridistas hasta barcelonistas, pasando por los atléticos es: "Si es que...Zidane no vale", "Tiene que llegar al Bernabéu un entrenador de verdad". ¿De verdad? ¿Es que las 3 Champions son de mentira o que?. Zidane es un entrenador que, durante su primer año y medio demostró una capacidad para repartir los minutos y tener a 25 señores en forma cuando, en cada partido, sólo juegan 11, que no se había visto desde hacía muchos años. El 'gran estratega' que es para muchos D. Diego Pablo Simeone, con todos mis respetos hacia su gestión por fructífera, juega toda la temporada con 13 jugadores y con una plantilla total de 19. Zidane juega con 25 y, al final del año, han jugado los 25, siendo curioso que todos coincidamos en que, el 90% de los 25 han jugado mucho más de lo que realmente han merecido (por méritos) o merecen (por calidad). Sin Zidane, Benzema estaría poco más que retirado...y no habría jugado la final contra el Liverpool siendo, en mi opinión, el mejor del partido en general; porque el otorgar a Bale el premio "player of the match" responde al doblete y a la espectacular chilena que supuso el 2-1. Sin Zidane, se habría vendido a Keylor Navas y, probablemente, el partido contra el Liverpool lo habría jugado Kepa, habiendo recibido el gol de Alexander-Arnold en la primera parte, dado que ese tipo de paradas de Keylor no entran dentro del repertorio habitual de Kepa. Sin Zidane, Isco no estaría ya en el Real Madrid, y menos aun tras el fichaje de Asensio (cosa que sigo sin encontrar relación dado que no son ni parecidos sobre el campo). Y sobre todo, Zidane ha traído algo nuevo al Real Madrid y es que, con cada sustitución, se puede cambiar el dibujo y jugar de otra forma sin que la gente que queda sobre el campo se pierda. Eso es algo que solo han conseguido entrenadores consagradísimos en la historia del fútbol. El Madrid empieza con un 4-3-3, que puede pasar a 4-4-2 cambiando a Casemiro por Isco, y que puede pasar a 4-5-1 metiendo en el campo a Lucas y Asensio. Y el equipo no se descoloca con los cambios. Con el 4-3-3 se corre, con el 4-4-2 se manda pero se entra mucho por el centro, quedando las bandas para los laterales, y con el 4-5-1 se asedia por las bandas, es decir, todo lo contrario que con el sistema anterior. Con estos sistemas, hay soluciones para todo y tres cambios para arreglar cualquier problema de planificación. Es cierto que el técnico del Real Madrid tiene los cambios demasiado estipulados en tiempo y forma, que parece que los "trae de casa". Pero también es verdad que lleva 3 años y medio como entrenador de primer nivel y que tiene 45 años. Igual algo de tiempo para pulir su forma de entrenar si que le queda.
En resumen, un futbolista que puede ser considerado por todos como uno de los 10 mejores de la historia, y por muchos como uno de los 5 mejores. Que tras una breve adaptación en categorías inferiores, ha cogido una máquina de triturar entrenadores como es el banquillo del Real Madrid y la ha domado y hecho a su imagen y semejanza. Pero todavía habrá quien piense que este señor no se merece estar en el Real Madrid porque "no sabe", que es la expresión más utilizada en este país para atizarle a alguien sin motivo alguno.
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