martes, 5 de mayo de 2020

¿PODRÁN FICHAR LOS EQUIPOS QUE HAYAN DECLARADO UN ERTE?



¡Vaya veranito nos espera! Ahora resulta que el ministerio de trabajo de España ha dicho que pondrá su lupa sobre los fichajes que se realicen, este verano en el fútbol español, por parte de aquellos equipos que hayan declarado un ERTE sobre jugadores y empleados del club en general. Pero ¿por qué?. Lo primero que se nos viene a todos a la cabeza en plan rápido es el aspecto ético de la cuestión. Por encima de la parte legal de la misma. Esta feo. Pedir ayuda y comprensión estatal, para una situación excepcionalísima que afecta gravemente a tus previsiones económicas parece comprensible. Siempre y cuando no te gastes "100 kilos" de golpe al mes de haber recobrado la normalidad. A nadie se le escapa lo difícil que es creerse la existencia de aquellas dificultades económicas cuando se materializa el fichaje. Pero, ¿se puede hacer? Y, de ser así, ¿cómo se van a gestionar los fichajes veraniegos con las competiciones aun en disputa? Ahora lo veremos...

En primer lugar, la ampliación de una empresa por el motivo que sea, no tiene porqué estar relacionado con un ERTE previo o, incluso, durante el mismo. La paralización de las cotizaciones por empleados durante el tiempo que dure el ERTE no tiene porqué ser motivo para que una empresa detenga otras actividades de gestión, planificación, reacondicionamiento, etc. Esto es la realidad visto desde un punto de vista superficial. El mismo punto de vista desde el que, parece ser, a tenor de las portadas deportivas del último mes, estaban viendo el asunto equipos como el Sevilla, FC Barcelona o Atlético de Madrid. Se hablaba de fichajes, de planificación de plantilla para el año que viene, y demás. Pero si profundizamos un poco en la cuestión jurídica, y sin querer ampliar en exceso el nivel de detalle para no aburrir al personal, digamos, sencillamente, que un ERTE requiere de una justificación. Es obligatorio justificar los motivos del ERTE. Y justificarlos muy a conciencia para que la administración pública te lo conceda. Dicho esto, se podría justificar perfectamente que una empresa necesita reservar una cantidad "X" para reestructuración en verano y que, ante el imprevisto del COVID-19 y su efecto en la falta de ingresos durante este mes por causas de fuerza mayor, necesitaría declarar un ERTE para solucionar un problema puntual de liquidez para con sus empleados. Falta de liquidez o, simplemente, que por causas ajenas a la empresa, los empleados no están pudiendo desarrollar su normal actividad. No tenemos los datos ni la documentación aportada por los clubes para confirmar o desmentir estos supuestos, pero lo que sí sabemos es que el ministerio de trabajo ha avisado de que estará muy encima de los fichajes realizados por los clubes que hayan acudido a esta herramienta. Por este motivo, se puede entender que desde la administración, probablemente, se haya requerido a los clubes para presentar cuentas actualizadas y ver si existen dichas reservas de las que "tirar" antes de declarar el ERTE. Parece bastante lógico dada la situación económica del país.

¿Esto quiere decir que no podrán fichar? NO. Claro que podrán fichar. Lo que se puede leer de las palabras del ministerio es que tendrán que hacerlo con dinero generado a posteriori de la crisis. Dada la cercanía del periodo de fichajes estival, los movimientos tendrán que ser quirúrjicos y muy estratégicos. Porque fichar se puede, y como digo, el expediente temporal de regulación de empleo no supone ningún tipo de limitación en sí mismo en lo que a gasto posterior se refiere. No hay ninguna norma que lo impida. Salvo que la administración te haya reclamado tus reservas para superar esta crisis y hayas contestado al requerimiento diciendo que están a cero, son insuficientes, etc. Eso es lo que parece que va a investigar el ministerio en cada uno de los fichajes de estos equipos. Por lo tanto, y ante una posible inspección de las gordas, lo suyo sería estarse quietos durante este periodo de fichajes o, si no hay más remedio que mover ficha, hacerlo mediante la capacidad crediticia del club. El fichaje sale más caro por culpa de los intereses, pero de cara a una revisión estatal del fichaje, el origen de los fondos no tendría el menor género de duda. Insisto en que, por "genero de duda" no digo que se trate de ningún tipo de dinero ilícito, sino que, dadas las circunstancias en las que se declarara el ERTE, podiese haber alguna incompatibilidad con las explicaciones dadas previamente para conseguir el "sí" de la administración.

Por otro lado, hay una duda que, aprovechando este artículo me gustaría resolver. Si un equipo juega Champions League en Agosto (como parece que va a ocurrir) y ficha a un jugador el 4 de ese mismo mes, por ejemplo, ¿dicho futbolista podría disputar los últimos partidos de la temporada 19-20? La respuesta es que sí. El periodo de fichajes del verano de 2020 viene con la peculiaridad de darse, simultaneamente, con el fin de las competiciones domésticas (salvo la francesa, en la que se ha declarado ya campeón al PSG) y continentales. Pero el procedimiento no requiere de ningún tipo de modificación reglamentaria. Aunque dadas las circunstancias, si hace falta aclarar esto. El periodo estival se va a resolver exactamente igual que se resuelve el invernal. En el momento que la orden de transferencia llegue a la FIFA (o a la federación correspondiente si se trata de un traspaso entre clubes pertenecientes a la misma federación), el jugador podrá se alineado por el equipo comprador. En este sentido, se respeterán el resto de normas aplicables al periodo invernal. Por ejemplo, si el FC Barcelona fichara a Neymar o el Real Madrid fichara a Haaland, no podrían disputar Champions en agosto al haberlo hecho con sus clubes de procedencia en fases previas de la misma competición. Pero si, por poner otro ejemplo, el Real Madrid recuperase a Lunin y el Barcelona recuperase a Rafinha (suponiendo que el acuerdo de compra por parte del Celta no se completase), ambos podrían ser alineados en una hipotética semifinal de Champions.

En cualquier caso, y salvando las dificultades actuales y los motivos, intuyo que este verano nos vamos a divertir más de lo habitual...

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