lunes, 29 de abril de 2019

¿RABIOT O POGBA?: LA DUDA OFENDE


De verdad que yo no termino de entender que ocurre con los medios de comunicación especializados en este deporte. Probablemente sea yo, que debe ser que no tengo ni idea de como funciona esto del fútbol, pero es que cada vez encuentro más diferencias entre la opinión pública mayoritaria y la mía. Y este, quizás, sea uno de los ejemplos más representativos...


Pogba es el jugador que todo el mundo considera como el centrocampista del nuevo milenio. Es fuerte, rápido, zancada larga y elegante, buen golpeo de balón y buen regate en corto. Todo esto lo tiene, y no seré yo quién niegue la evidencia. Pero de todas las virtudes que un centrocampista debe tener en mayor o menor medida, nos estamos dejando en el tintero la verdaderamente imprescindible: rigor táctico, visión de juego...inteligencia sobre el campo en definitiva. Y de esto Pogba no tiene nada. No es que sea peor que otros (lo que ya sería un déficit importante), es que no sabe lo que es. En primer lugar porque su 'ego' no le permite ver más allá de ese color dorado brillante que adorna la suela de sus botas. Y en segundo lugar porque es cierto que, hasta que no ha llegado a cierto nivel competitivo, sus cualidades físicas y técnicas le han permitido el lujo de olvidarse de entrenar tácticamente. Y aunque no sea así de descarado, decidme si alguno se imagina a Pogba con 14 años, contra niños de su edad, diciendo: "No me voy a dar el autopase, no vaya a ser que no llegue". Por el carácter que tiene el futbolista, y dado su poderío físico, podemos intuir que se trata de una frase que no pensó muy a menudo. El problema viene cuando te encuentras en un nivel élite. Con técnica y físico no suples semejante carencia táctica. Y de ahí la importancia de saber "jugar con cabeza" sobre un campo de fútbol. Porque a ciertos niveles, el físico y la técnica no bastan. Pero la táctica si nos puede valer, en un momento dado, para suplir esa falta de físico o técnica. Y hemos podido verlo a lo largo de la historia del fútbol con futbolistas que, sin ser balones de oro, han conseguido ser importantes en equipos de primer nivel. Los Cambiasso, Gattusso, Makelele, Thiago Motta, etc...han sido futbolistas con unas limitaciones técnicas o físicas (con respecto a sus rivales de posición) obvias pero que por táctica y por ese "saber estar" sobre el campo, han sido más importantes que compañeros de posición con mucha más calidad. Ambrosini era mucho mejor jugador que Gattuso en el Milan o Flavio Conceiçao que estaba, técnicamente, a años luz de Claude Makelele. Pero el tema es que no sólo no servían para suplir a su compañero con eficacia, es que son recordados como auténticas "mochilas" de las que no terminamos de entender los motivos por los que acabaron triunfando en su carrera. Y, sinceramente, me extraña sobre manera que, a estas alturas de la película, y vistos los resultados del Manchester United y como Mourinho prefería jugar con Fellaini y Ander Herrera antes que con Pogba, sigamos pensando en Pogba como en el paradigma del centrocampista moderno. No lo entiendo.

Por otro lado está Rabiot. Jugador de coste de inversión = cero. Eso para empezar. Recordamos que, en el caso de Pogba, se están manejando cifras que rondarían los 100 millones de euros. Y lo que está claro, antes incluso de defender las virtudes de Rabiot, es que Pogba no puede ser una inversión 100 millones de veces superior a Rabiot. En eso espero que estemos de acuerdo. No tiene sentido. Pero menos sentido tiene aún cuando Rabiot resulta que es mejor jugador que Pogba. Es más futbolista. Es cierto que rueda menos anuncios, que genera menos publicidad, y que sobre el campo es menos espectacular a la hora de ejecutar sus acciones. Pero Rabiot es el Gattuso de Ambrosini, el Makelele de Conceiçao, ese jugador que cuando juega aporta al grupo porque, entre otras cosas, piensa en grupo. Aun así, lo más sangrante de todo esto es que Rabiot no es Makelele ni Gattuso. Rabiot es un mediocentro con muchísima calidad técnica, física y táctica. Lo que está sufriendo el PSG desde que Rabiot fue castigado con el exilio a la grada por no querer renovar, llega al punto de haber perdido la Copa de Francia contra el Rennes. Rabiot tiene un grandísimo manejo de balón, un físico portentoso (189 cm de altura) y un conocimiento táctico que, además, ha sido especialmente puesto a prueba durante estos años en un PSG en el que sólo él y Verratti se encargaban de la intendencia, del trabajo sucio o, por decirlo más correctamente, del rigor táctico de un equipo que, sin ellos, se desmembra en el minuto 15 de cada partido. Por contra, Pogba no ha sido capaz de poner orden en un equipo con Mourinho en el banquillo, un entrenador famoso por sentar a gente que, aunque metiese 3 goles, si los metía sin hacer lo que el entrenador decía, quedaba retratado para el portugués. Y el primero en quedar retratado de ese United fue el propio Pogba. ¿Y a ese señor es al que quiere Zidane para poner orden en el centro del campo del Real Madrid? ¿Y no quiere a Rabiot? Como decía al principio del artículo, por lo menos, así es como lo reflejan los medios especializados. 

Pues yo lo siento pero no me lo creo. Porque llevo visto a Zidane como entrenador y como director deportivo lo suficiente como para no creerme que prefiera a Pogba antes que a Rabiot. Pero si es así, sinceramente, o hay algo personal detrás de esta decisión o yo no entiendo nada...

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