Hay un aspecto del fútbol actual que cada día se me hace más evidente y que no es que me extrañe pero si llama poderosamente mi atención. Cada día nos encontramos en esa franja media ( valorando jugadores de 0-10) de valor entre 6 y 8,5 con jugadores que han renunciado por completo al talento para centrarse en el físico y surgen dos preguntas: ¿ por qué ocurre esto? y ¿esto es bueno?
Evidentemente el debate está ahí y hay opiniones de todo tipo y muy respetables. Que la profesionalización del fútbol ha ido a más, generando unos movimientos de dinero y una imagen cada día mas grande que hace que se venda a espuertas todo lo relacionado con este mundo (hasta calzoncillos) es ya una realidad, una realidad que ha hecho que en la inmensa mayoría de equipos perdamos a ese carismático, entrañable e inconfundible 'tonelete'. La preparación física de los jugadores es sencillamente extraordinaria. Ya no vemos a los Puskas con su barriguita de haberse tomado dos cervecitas después del entreno, ni a esos Effenbergs paseando por una ciudad con su sombrero vaquero y su puro de metro y medio porque la realidad actual manda que los jugadores de fútbol hagan dominadas, quemen el verano con boxeo, hagan sprints con 20 kg de peso atado a la espalda al mas puro estilo NFL sin tener en cuenta la calidad individual y esto no siempre es bueno. Son deportes distintos y por ende con exigencias físicas distintas.
Se empieza a buscar que los jugadores sean atletas. Que aguanten 90 minutos a un ritmo absolutamente de locos. Incluso a esos jugadores con un talento innato para esto del fútbol se les evalúa para bien o para mal en función del físico. Poniendo ejemplos concretos podemos hablar de CR7, que a sus 33 años tiene el físico de un chaval de 20 años, cosa muy loable, pero no es menos cierto que esto ha hecho que haya perdido muchísima elasticidad y le cueste más regatear. Con los problemas estomacales de Leo Messi se han escuchado auténticas burradas, que si se dopa, que si la hormona del crecimiento... la realidad es que Messi, con sus palabras, "tenía un quilombo en el estomago, comía chocolate, soda, alfajores... ahora como mejor". Un dieta desequilibrada para un jugador de fútbol profesional es casi mas dañina y venenosa que el tabaco por el tipo de exigencia física, pero Messi jugaba extraordinariamente bien vomitando y sin vomitar.
Que los jugadores sean atletas hace que no te baste con saber jugar, es más, en algunos casos, sangrantes casos, da igual que no sepas jugar. Hemos llegado a un punto en que la gente no cree que sea necesario saber irte de al menos un futbolista con un regate o un movimiento para ser titular porque llegas a todas y eres un auténtico peaje defendiendo. Los partidos se convierten en un ida y vuelta trepidante para el espectador pero horrible para los entrenadores. La Premier es un magnífico ejemplo de esto, si les quitan el balón siguen corriendo de una portería a la otra durante 10 minutos, hasta que se dan cuenta de que no hay balón. A un tío como Gareth Bale, que es bastante bueno con la pelota, se le tiene que relegar al banquillo cuando no está fisicamente al 100% porque no consigue dar el nivel mínimo exigible en relación a sus compañeros de otra posición, con otro rol y otras características porque estos últimos han corrido más. Y digo Bale como digo Torres, Benzema, Varane o Morata. ¡Maldigo el día en el que la UEFA empezó a sacar las estadísticas de kilometraje de cada jugador! Se ha convertido en el argumento definitivo para condenar a un futbolista independientemente de lo que haga con el balón en los pies.
Esta nueva tendencia hace que en las canteras sean rechazados de primeras los nuevos Isco, Griezmann, Modric, Iniesta, etc porque son bajitos y no tienen un físico poderoso. Que un futbolista dependa únicamente de su calidad y técnica está en el ostracismo más absoluto. A los niños hay que echarles un balón, no unas pesas de 30 kg, para eso ya habrá tiempo en función de como crezcan.
Que el fútbol no este sometido a la normativa de la AMA, es decir, que no haya control de sangre, sólo de orina, hace que los jugadores puedan someterse a tratamientos que van desde una mera infiltración de cortisona hasta transfusiones para estar físicamente como un toro el día del partido, porque parece que lo que importa es la forma física, no saber jugar a esto.
Pero ojo, que no todo es malo. Que los jugadores sean atletas no sólo repercute un bien importante en la salud de los futbolistas que les hace no acabar como Batistuta, que con 50 años tiene las rodillas de un anciano de 90, si no que también hay unos exámenes para el corazón muchísimo más rigurosos (cosa hipócrita si luego los hinchas de placenta de cabra y corticoides por otra parte, es más como si vigilases el límite de hasta donde puedes llegar para que no le estalle la patata que preocuparte de verdad por él). Por otra parte, también les proporciona altos ingresos por publicidad e imagen, de los que en un momento dado, los clubes pueden obtener un porcentaje para sanear cuentas y elevar la competitividad. También repercute en el aspecto global del juego, la excepcional forma física ayuda a los talentos tácticos que tienes, ya sea en un regate a alta velocidad, un disparo en carrera o un slalom en sprint, y esto no es descubrir la pólvora. Hace que se tengan más formas de jugar, ya que para parar a un atleta tienes dos opciones, quitarle el balón y que no la toque (saca a los jugones) o ponerle otro atleta delante (el pivote destructor de toda la vida). Y por supuesto permite ver a grandes jugadores hasta casi los 40 años en un nivel más que aceptable como CR7, Zlatan o Buffon, si bien es verdad que hay que dosificarlos muchísimo.
Un profesional que percibe un auténtico dineral por entrenar todos los días y jugar partidos de fútbol, en definitiva, por hacer deporte, lo mínimo que le puedes exigir es que este en forma. Que se cuide a lo mejor es más complicado, pero por lo menos estar en forma. Y el silogismo es claro, cuanto menos te cuides, más duro será el entrenamiento. No es plan hacer un Mkhitaryan, llegar después de verano a la foto oficial y que la camiseta tenga vuelo por debajo de la barriga porque te has puesto 'morao' de las lentejas de la abuela, pero de ahí a lo actual hay una diferencia escandalosa.
Concluyendo; lesiones crónicas y extrañas, tratamientos ineficaces que agravan lesiones y pérdida de cualidades técnicas son algunos de los problemas derivados de esto. Nos cargamos a jugadores excepcionales para que sean máquina físicas. Para que James juegue de dulce no necesito que haga 100 dominadas, para que Ramos cumpla probablemente si lo necesite, pero cada cuerpo es un mundo; sin embargo si James quiere hacer anuncios necesita los abdominales de Ivan Drago. ¿Cuántas veces hemos oído eso de "es que Modric no vende"?. Vietto tiene que regatear y hacer goles, no subir cuesta arriba a la velocidad de Thomas. Se mete a los 25 jugadores en un saco y hoy a correr, mañana pesas y pasado a tirar a puerta... mal, hay que personalizar los entrenos. ¡Ojo! en ningún momento he dicho que no haya que hacer entrenamientos físicos ni que cada jugador entrene lo que le de la gana, pero hay que hacerlo con cabeza.
Yo personalmente creo en el fútbol. Me gusta el fútbol. Me gustan los jugadores con clase e imaginativos. Yo no quiero jinetes del apocalipsis que su único objetivo es la destrucción (futbolísticamente hablando). Hoy queda muy poco talento, o como mínimo, menos que antes. El fútbol está pasando a manos de corretones y jugadores que su único aval es que trabajan mucho. Es necesario que en un equipo haya corretones y gente que trabaje, no digo que no, pero no solamente gladiadores, también hacen falta artistas. Es lógico que se tienda a que los futbolistas tengan cuerpos apolíneos por todo lo que hemos dicho respecto a la publicidad, pero por favor, no nos quiten la magia, no nos quiten la imaginación del regate imposible, no nos quiten el fútbol... No valoremos más al corretón que al jugador que nos levanta de la silla. Poniendo un ejemplo concreto, que la gente pensase que el PSG sin Neymar tenía mas peligro porque jugaba Di María es uno de los casos que se desprenden de esto. Nos están acostumbrando. Sea el equipo que sea, es más peligroso con Neymar que, con todos los respetos a Di María, con un corretón.
La forma física es lo que es, una ayuda para que la técnica despunte, no un argumento futbolístico. Si son grandísimos jugadores y encima tienen un físico extraordinario pues mejor pero no caigamos en la crueldad de la filosofía americana, se puede ser un despojo físicamente y ser un jugadorazo. Repito: hay que personalizar los entrenamientos.
Me encantan esos jugadores que corren con sentido, con sabiduría táctica, que su arma principal es la técnica, que no corren como pollos sin cabeza. Me gustan Pirlo, Ronaldinho, Ronaldo (O Fenómeno), Zidane... jugadores que hoy sería difícil ver porque les molerían a patadas pero que dejarían a mas de medio equipo sentado sin hacer un sólo sprint. Que Usaín Bolt pueda entrenar con el Dortmund y dé el nivel resume perfectamente lo que vengo a decir. Para vuestro equipo: ¿Reus o Bolt? Yo me quedo con Marco Reus y con lo que eso significa, pero esto es una opinión personal y el gusto va por barrios.
Yo personalmente creo en el fútbol. Me gusta el fútbol. Me gustan los jugadores con clase e imaginativos. Yo no quiero jinetes del apocalipsis que su único objetivo es la destrucción (futbolísticamente hablando).
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